La diarrea en los bebés se caracteriza por heces sueltas o líquidas que ocurren de 3 a 12 veces al día.1 Esta diarrea puede ser causada por varios factores, incluyendo la dentición, debido a un aumento de la saliva que llega al intestino, hasta una posible infección por un virus estomacal.2
Es muy importante monitorear esta condición de cerca porque puede ocasionar deshidratación, lo que puede ser un problema muy grave para un bebé. Al entender las causas y las señales de la diarrea y cómo cuidar a tu bebé cuando sufre de ella, podrás asegurar la salud y el bienestar de tu hijo. Vamos a explorar este tema más a fondo.
La diarrea en los bebés se caracteriza por movimientos intestinales frecuentes, sueltos y, a menudo, líquidos. Puede ser causada por varios factores, como infecciones, alergias o intolerancias a ciertos alimentos, cambios dietéticos y la dentición.
Los síntomas comunes pueden incluir:
Diarrea líquida en bebés alimentados con leche materna
Diagnosticar la diarrea en un bebé alimentado con leche materna puede ser difícil, ya que sus heces normales son bastante líquidas. Además, los bebés amamantados suelen hacer popó más de seis veces al día. Si tienen menos de dos meses de edad, incluso es normal que hagan popó después de cada comida. Sin embargo, es posible que tu bebé esté sufriendo de diarrea si el número de veces que hace popó en un día sube repentinamente.
También es posible que tu bebé tenga diarrea si encuentras moco o sangre en su popó. Un olor anormalmente fuerte también puede ser una señal de diarrea. Los bebés con diarrea frecuentemente tienen dificultad para comer, fiebre y poca energía, así que estos síntomas también te pueden ayudar a identificar si tu bebé está sufriendo de diarrea.
Diarrea líquida en bebés alimentados con fórmula
Los bebés alimentados con fórmula pueden evacuar de una a ocho veces por día durante la primera semana. Con el tiempo, esto comienza a disminuir a una a cuatro veces por día. Esto puede durar hasta los dos meses de edad. Es posible que tu bebé esté sufriendo de diarrea si repentinamente comienza a hacer popó más frecuentemente o si sus heces se vuelven más sueltas. Si esto dura tres o más evacuaciones, entonces es posible que el bebé tenga diarrea.
Otras maneras de identificar la diarrea en tu bebé son la falta de apetito, poca energía y la fiebre.
Las formas más comunes de lidiar con la diarrea líquida en bebés son las siguientes:
La diarrea indica que tu bebé está perdiendo una gran cantidad de líquidos, lo que podría deshidratar a tu bebé. Si observas los siguientes síntomas, consulta a tu pediatra de inmediato.
La flora intestinal de tu bebé madura conforme va creciendo, lo que podría ocasionar irregularidades en sus movimientos gastrointestinales. Esto se debe a que la microbiota, una comunidad compleja de microorganismos en el tracto digestivo, juega un papel crucial en la digestión y la absorción de nutrientes. La composición de esta microbiota cambia dependiendo de la dieta, así que cambiará conforme tu bebé incorpora nuevos alimentos en su dieta. Esto puede ocasionar un cambio en la frecuencia y consistencia de sus heces.
Sin embargo, es importante monitorear de cerca la popó de los bebés menores de tres meses de edad. Si la diarrea viene acompañada de fiebre, llanto y falta de orina durante más de tres horas, entonces debes consultar a tu pediatra. Recuerda que el sistema inmunitario de tu bebé aún está en desarrollo y puede no estar completamente equipado para combatir las infecciones que podrían estar causando estos síntomas.
Si tu bebé presenta alguno de estos síntomas, es importante llamar a tu pediatra y buscar una opinión profesional. Un diagnóstico y tratamiento a tiempo oportuno puede prevenir complicaciones en la salud de tu bebé y asegurar su bienestar.