Pero no es necesario que te preocupes, gran parte de estas bacterias en realidad son beneficiosas para la salud de una persona y son conocidas como probióticos. Los prebióticos son el hermano menos conocido de los probióticos, son las fibras no digeribles que permanecen en el intestino delgado y en el estómago que ayudan a alimentar a los probióticos para crecer y desarrollarse. Existen dos tipos de prebióticos: los GOS (de origen animal) y los FOS (de origen vegetal).
De origen animal (GOS)
De origen vegetal (FOS)
Fibra soluble no digerida en el intestino delgado y el estómago
Cuando llegan al colon se convierten en una fuente de alimento para las bacterias beneficiosas
El aumento de las bacterias beneficiosas en el intestino conlleva muchos beneficios para la salud, especialmente para el sistema digestivo
Comer bien y asegurar que haya una buena cantidad de bacterias saludables en el sistema digestivo de tu hijo puede hacer la diferencia en su bienestar. Puede ayudar a prevenir niveles altos de colesterol en la sangre, las cavidades y reduce los riesgos de alergias en los niños. Entre los beneficios adicionales se incluyen:
Proporcionar la protección para los intestinos
Ayudan a ablandar las heces para la prevención del estreñimiento. Crean una capa protectora intestinal contra las bacterias dañinas.
Fortalecimiento del sistema inmunológico
Aumentan las bacterias beneficiosas para combatir las bacterias dañinas. Estimulan el crecimiento de anticuerpos contra los ataques de bacterias dañinas.
Prevención de problemas estomacales
Fomentan las bacterias beneficiosas (probióticos) y ayudan a promover su fermentación en los intestinos
Mejora de la absorción de nutrientes
Los prebióticos se encuentran naturalmente en la leche materna y ayudan a nutrir y estimular el crecimiento de los probióticos beneficiosos en el intestino. Esto también ayuda a explicar por qué los bebés amamantados sufren menos infecciones. Los prebióticos también se producen naturalmente en muchos alimentos y generalmente, los alimentos crudos tienen más fibras prebióticas que los alimentos cocidos, tales como:
Otras fuentes incluyen:
Consejo: Una taza de sopa/cereales debería incluir 1 cucharada de verduras finamente picadas y de fibras dietéticas para complementar tanto las fibras solubles como insolubles.